Los medios de comunicación pueden jugar un rol muy importante en la mejora de la percepción que sobre las mujeres tiene nuestra sociedad. Nos referimos a la percepción que sobre nosotras se tiene como profesionales, como mujeres de negocios, como empresarias. Somos muchas las que estudiamos y con éxito (60,9% del alumnado universitario graduado de primer y segundo ciclo fueron mujeres, INE datos para el curso 2007-08), muchas las que trabajamos (en 2009 el 44% de la población ocupada éramos mujeres) y menos, pero bastantes las que dirigimos empresas o instituciones. Indiscutiblemente, suficientes como para ocupar páginas y páginas en los medios escritos, en los online y en la radio y televisión y sin embargo, brillamos, pero no por nuestros diamantes, sino más bien por nuestra ausencia. Las noticias recogen datos y citan a expertos y a un muy reducido número expertas. Pocas se refieren a nosotras cuando se habla de negocios. Las imágenes que ilustran las noticias sólo puntualmente incluyen “faldas”. Y pocas son también, las tribunas rubricadas por féminas. Así lo prueba el estudio llamado “Global Media Monitoring Project” que puntualmente cada año analiza 315 noticias en 13 medios españoles y de otros países. Según recoge la última edición de este estudio, sólo en el 24% de las noticias aparecen identificadas mujeres, y en las que aparecen es principalmente cuando éstas se refieren a la infancia y juventud. Tampoco son mejores los datos relativos a las veces en las que se nos cita como expertas (20%), ni los que se refieren al número de veces en que el portavoz de una empresa e institución es una mujer (19%) y eso que, según varios estudios justamente destacamos en la habilidad de comunicar. Lo triste es que en los 5 años que se lleva realizando el estudio, la situación en España ha mejorado sólo 1 punto. Además, muchas veces lo que se publica refleja una realidad apoyada en estereotipos que perpetúan situaciones injustas o beneficios o situaciones de poder.
¿Por qué no estamos? ¿Por qué no hablamos? ¿Por qué no opinamos? ¿Por qué no escribimos? ¿Por qué si se la mujer se hace visible, lo es en tantas ocasiones en relación con estereotipos que no reflejan la realidad actual de su rol en la sociedad? Creo que la respuesta es sencilla: Posiblemente por una suma de razones como que no nos preguntan, que no dedicamos tiempo a escribir tribunas o que no estamos donde hay que estar para que nos retraten, graben o pidan opinión.
Esta es la situación, pero ¿qué debe pasar para que cambie? Tengo la convicción de que el cambio debe partir de una toma de consciencia de la situación y de una decisión de todos los actores que pueden jugar un rol para provocar éste. La situación ya hemos visto cuál es y está claro que requiere actuaciones. Los actores somos nosotros, individuos, mujeres y hombres que conformamos esta sociedad; los medios de comunicación y las empresas e instituciones que, de una u otra manera conforman el entramado económico de nuestro país. Todos ellos somos corresponsables y podemos y debemos lograr que se materialice el cambio.
Se dice que tan importante como una estrategia y objetivos claros, lo es tener un plan de acción y eso es lo que propongo a continuación con los llamados 15 deberes para hacernos más visibles.
Los 5 deberes para las mujeres:
- “Yo también sé de eso”: Las mujeres debemos hacer que nos conozcan los periodistas y convertirnos así en “expertas” con capacidad para opinar.
- “Escribo luego existo”: Las mujeres debemos esforzarnos en escribir más artículos sobre temas en los que nos consideremos especialistas.
- “Estoy luego existo”: Las mujeres debemos hacer lo posible para estar presentes en actos públicos y así salir en las fotos.
- “No más estereotipos”: Quitémonos los miedos, apoyémonos en datos y cuestionemos los estereotipos, ello no significa ser feminista sino reivindicar la realidad.
- “Aunque no soy modelo, yo también tengo un book”: Es importante tener unas buenas fotos, un buen CV, en resumen un “branding personal” adecuado, que refleje lo que realmente somos y valemos.
Los 5 deberes para los medios de comunicación:
- Principio del “arcoiris”: Las redacciones podrían proponerse el objetivo de incluir más mujeres en las fotos y más fotos de mujeres. El gris y las corbatas están bien, pero el arcoíris aún mejor.
- Principio de la “belleza media”: No todas las mujeres son estilizadas y bellas. Las imágenes deben reflejar la belleza media y no sólo, como ocurre muy a menudo preferiblemente a las más bellas.
- Principio de la “titulitis”: Las redacciones podrían proponerse el objetivo de incluir en cualquier cita de una mujer su cargo o titulación.
- Principio de “y ellas qué piensan”: Las redacciones podrían proponerse pedir aplicar un principio de “cuota” a la hora de pedir opinión que dé cierta representatividad a las mujeres.
- Principio de “guerra a los estereotipos”: Las redacciones deben vigilar que sus contenidos no se favorece el fortalecimiento de estereotipos como: mujer directiva = mujer agresiva; las mujeres no pueden trabajar juntas o el hogar y la maternidad son cosa de mujeres.
Los 5 deberes para las empresas e instituciones respecto a las mujeres que forman parte de sus equipos de profesionales:
- “Mujeres a escena”: Las empresas podrían fomentar activamente la actuación de sus profesionales como portavoces.
- “Fotos femeninas”: Las empresas podrían esforzarse por incluir mujeres en las fotos para darles mayor visibilidad.
- “Aprender a hablar en público”: Las empresas podrían formar a las mujeres en habilidades de comunicación.
- “Branding para empleadas”: Las empresas podrían fomentar planes de marca personal para sus directivas con potencial
- “Mujeres escritoras”: Las empresas podrían incentivar a sus mujeres profesionales a escribir artículos doctrinales y a dar su opinión para construir su reputación como expertas en una materia.
En resumen, hay mucho trabajo por hacer y todos podemos aportar nuestro granito de arena. El objetivo es lograr que lo normal, lo real, ocupe en los medios el espacio que merece, el de protagonista de actualidad, en la que las mujeres somos ya unas probadas profesionales y ello depende de todos: nosotras, los medios y las empresas e instituciones donde las profesionales desarrollamos nuestra actividad. Ahora que nuestro país está inmerso en un proceso de cambios tan radicales, quizás es un buen momento para reflexionar sobre esta cuestión y incorporar en nuestro nuevo manual de uso, estos 15 deberes que sin grandes inversiones ni sacrificios, tendrán un impacto seguro en la imagen del rol de las mujeres en nuestra sociedad, contribuyendo así a su desarrollo, haciéndola más justa e igualitaria.